En la práctica, es muy frecuente la existencia de bienes inmuebles, que carecen de un título público de propiedad (esto es, de escritura), y al mismo tiempo, y fundamentalmente como consecuencia de esa carencia de escritura, no se hallan inscritas en el Registro de la Propiedad. Por ello, el propietario es titular civil del inmueble, pero no goza de la especial protección frente a terceros que sólo conceden la escritura pública (como título de legitimación y probatorio del dominio del propietario) y la inscripción en el Registro de la Propiedad (que por el principio de fe pública registral garantiza que lo no inscrito no perjudica a terceros, y que el tercero que adquiere confiado en el Registro y con las condiciones exigidas por la ley es mantenido en su adquisición.
Para que se pueda asegurar jurídicamente una propiedad, el dueño debe realizar una escrituración, pues es la única forma de acreditar, verazmente, la posesión de dicho inmueble puesto que cualquier otro tipo de documento (como los contratos privados) no es reconocido ante la ley mexicana como teniendo valor.
Al escriturar una casa, podrás comprobar ante terceros la propiedad del inmueble. Los pasos que debes seguir son los siguientes:
- Asiste a un notario:él solicitará un certificado y avisará al Registro sobre la compra. Esto ofrece un respaldo legal desde iniciado el proceso así como una constancia de uso de suelo y no adeudo de predial y agua.
- El notario retiene y paga los impuestos (federales y locales)a las autoridades correspondientes; prepara la documentación y la redacción de las escrituras.
- Posteriormente, tramita la inscripción en el Registro Público de la Propiedady se expide una copia certifica de la escritura.
Una escritura de propiedad es un documento realizado por un notario público para establecer, jurídicamente, las obligaciones y los derechos del individuo que compra o hereda una vivienda o un terreno.